Un día corriendo por el recinto de la EXPO vi a unos chicos
practicando equilibrios y acrobacias sobre una cinta amarrada a dos árboles.
Coincidiendo que esos días estaba renovando mis programaciones de educación física,
esa actividad me dió una gran idea. Empecé a investigar por Internet de que se
trataba esa novedosa modalidad y rápidamente me apareció en el buscador mi
nuevo descubrimiento: slackline, traducido al castellano “cuerda floja”.
Aunque en un principio pueda parecer que es una copia del
funambulismo, dista mucho entre una actividad y otra. La principal diferencia
reside en la tensión de la cuerda o cinta que usamos para la práctica. En el
funambulismo se usa un cable metálico totalmente tenso, mientras que en el
slackline se camina sobre una cinta plana de nylon o poliéster, la cual no está
totalmente tensada. La cinta del slackline es ligeramente elástica lo que
permite realizar saltos y movimiento más dinámicos.
La cinta se puede colocar con diferentes grados de tensión y
con ello realizar diferentes tipos de actividades o trucos. Hay varias
modalidades, pero yo, para mis clases de educación física, me quedaré con la
modalidad de tricklining. Es el tipo más común de slacklining y consiste en
fijar la cinta a dos árboles, a una altura del suelo no superior a un metro. En
ella practicaremos equilibrios dinámicos, saltos, movimientos diversos y algún
truco acrobático. Aunque para mi aplicación didáctica me quedare con los
equilibrios, saltos y movimientos.
Me llamo la atención porque se trata de un material novedoso
y por lo tanto muy motivante para mis alumnos/as. Únicamente necesitamos la
cinta, la cual no es excesivamente cara (en tiendas Barrabes la tenemos por
menos de 50€). Además ofrece la posibilidad
de trabajar el equilibrio dinámico en una superficie diferente a la habitual,
adaptando mis habilidades básicas a una situación desconocida. Ideal para segundo
y tercer ciclo de Primaria.
Yo la he secuenciado dentro de mi primera unidad de
actividades en la naturaleza, la cual me sirve como telón para trabajar y
mejorar el equilibrio estático y dinámico, así como aumentar el autoestima del
alumno/a, consolidar algunas habilidades motrices básicas y adaptar estas a situaciones
no habituales, mejorando el mecanismo de ejecución. Esta primera unidad didáctica
de actividades en la naturaleza trabajo contenidos como los citados
anteriormente usando como hilo motivador la trepa (juegos en espalderas), una mínima
iniciación a la escalada en las espalderas (regla de los tres apoyos) y el
novedoso slackline. Lo ideal sería complementar la unidad con el Programa
gratuito de “CAI montaña y medio ambiente” que oferta a centros educativos la
conocida caja de ahorros.
La actividad del slackline también puede servirnos para
trabajar aspectos actitudinales que incluye nuestro currículo de educación física,
como es el respeto del entorno y el medio ambiente. ¿Cómo? Muy fácil. El
anclaje de la cinta normalmente se realiza entre dos árboles, de tronco grueso.
Si no ponemos un paño o tela protectora en cada árbol, la tensión de la cinta
puede dañar la estructura del tronco. Es una manera sencilla, de hacer ver a
nuestros alumnos/as lo importante que es proteger el mínimo detalle de nuestro
entorno.
Cuelgo algunos videos, que pueden servir para explicar y
motivar a los chicos/as antes de la sesión.
Buen articulo, visitar Byslackline si os gusta este deporte y queréis más información, o por si os planteáis adquirir material para practicarlo.
ResponderEliminarSaludos
Gracias Fernando por el comentario. En el colegio donde me encuentro ahora no disponemos de kit para practicar slackline. Si el presupuesto lo permite adquiriré uno para el departamento de E.F. Muchas gracias, visitare la pagina. Un saludo.
ResponderEliminarHola Jose Luis, hemos cambiado de nombre comercial, ahora somos Urbantrick para cualquier cosa que necesites.
ResponderEliminardonde puedo encontrar metodologias para aplicar en niños???
ResponderEliminarestoy implementando un taller